Los autistas piensan de manera distinta en muchas formas. Aquí hay algunas:
Los autistas pueden notar pequeños detalles que otras personas no notan. Podemos ver pequeños errores que otras personas no ven, cómo una letra equivocada en un texto.
Podemos prestarle mucha atención a cosas que otras personas no consideran importantes. Podemos tener muy buena memoria para los datos, por ejemplo, datos de nuestros intereses especialesCosas que le interesan mucho y muy fuerte a una persona autista..
A muchas personas autistas nos gusta la rutina. Puede que nos guste hacer las mismas cosas todos los días, o comer la misma comida todos los días. Las rutinas nos ayudan a saber qué va a ocurrir cada día.
Los cambios pueden asustarnos, porque estamos más calmados cuando las cosas se repiten en una rutina. Saber lo que sucederá nos ayuda a darle sentido y propósito a nuestra vida.
Las personas autistas a veces piensan en blanco y negro. Por ejemplo: las cosas están bien o están mal, una persona nos agrada o nos desagrada, tenemos la capacidad de hacer algo o simplemente no podemos.
A veces podemos encontrar el punto medio, pero es difícil. Pensar en blanco y negro no tiene que ser algo malo. Por ejemplo, podemos distinguir cuando algo es correcto o incorrecto, y ayudar a las personas a hacer lo correcto.
Las personas autistas aprenden de manera diferente.
Puede que aprendamos las cosas en un orden distinto, por ejemplo: lo “difícil” antes que lo “fácil”.
Podemos ser muy buenos para una cosa y malos para otra.
Puede que no entendamos algo, y luego, algunas semanas después, de pronto lo comprendamos.
Puede que necesitemos que algunas cosas nos las enseñen muy despacio, y otras las aprendemos muy rápido, o podemos necesitar que nos enseñen algo más de una vez. Aprendemos las cosas de modo distinto y esto nos ayuda a resolver problemas que otras personas no pueden resolver.